¿Por qué se desprende los aplacados de Fachadas?
07.07.2016 15:43
El desprendimiento al vacío del aplacado de piedra natural o cerámica, es una de las patologías más comunes desde hace años.
Se trata de aplacados adheridos al paramento vertical mediante pasta de mortero de cemento y debido a la falta de experiencia en la selección de los materiales de agarre y la utilización de técnicas de colocación inadecuadas, hace que se den este tipo de patologías a corto plazo.
Este tipo de anomalía se produce sin aviso y presenta un gran peligro de daño potencial para las vidas humanas.
POSIBLES CAUSAS:
Técnica Aplicada:
Los morteros no podrá aplicarse en forma de pegote directamente sobre la rasilla, este tipo de técnica de aplicación disminuye considerablemente la adherencia.
Corresponde a una mala ejecución y a una posible posterior patología, Sería recomendable haber utilizado otro tipo de mortero más rugoso sobre la rasilla, como por ejemplo un adhesivo cementoso o monocapa, así dejarían de existir superficies excesivamente lisas e incrementaría la adherencia entre el mortero adhesivo y el soporte. A la hora de elegir el material de agarre adecuado a las condiciones necesarias en el revestimiento de fachadas deben tenerse en cuenta tres aspectos principales:
- Compatibilidad entre el cerramiento, el adhesivo y el revestimiento cerámico, debiendo garantizar un alto nivel de adherencia, recurriendo a adhesivos cementosos que contengan una adecuada carga de resinas para garantizar la necesaria adherencia química.
- Alta deformabilidad de las capas que lo componen, para soportar los movimientos del sistema debido a las flexiones por los cambios térmicos e incluso de posibles vibraciones. Los materiales deben absorber las tensiones generadas.
- Resistencia al agua, ya que el adhesivo estará sometido a la acción de la lluvia y deberá resistir el contacto permanente con el agua sin manifestar alteraciones en su adherencia o deformabilidad. Esta limitación hace que los adhesivos de Dispersión o Pastas Adhesivas, que presentan elevadas prestaciones en cuanto a adherencia y deformabilidad, resulten inadecuados para el revestimiento de exteriores debido a su degradación en contacto con el agua.
Junta de Dilatación.
Las juntas de colocación contribuyen a absorber las deformaciones producidas por el soporte y moderan las tensiones que se generan en el embaldosado, por lo que su diseño debe considerarse con especial cuidado para prevenir fracturas y desprendimientos del revestimiento.
En muchos casos, la junta de dilatación es meramente inexistente, es decir, las dos piezas de piedra natural tienen junta a hueso. Y además si está situada la fachada con orientación sur, está expuesta a temperaturas extremas, debido a la diferencia de temperatura entre la noche y el día, esto propicia una gran dilatación y contracción del material. Al comprimirse y traccionarse entre ellos puede ser la causa de un posible desprendimiento.
Morteros inadecuados.
En la aplicación de aplacados como revestimiento de fachada se tendrá muy en cuenta el tipo de agarre a utilizar. Así el tipo de mortero dependerá directamente del uso que le demos, por lo tanto, no se podrá utilizar un mortero convencional de albañilería, como es por ejemplo el mortero para fábricas o el mortero de revoco y enlucido para un aplacado, sino un mortero especial.
Existen varios tipos de morteros especiales en el mercado, como es por ejemplo el mortero o cemento cola, el mortero monocapa, el mortero para solados, morteros de reparación estructural, mortero de impermeabilización,… De todos estos, para aplacados se utiliza básicamente el mortero de revoco que servirá como capa de regularización del soporte y el mortero o cemento cola que se aplicará encima del revoco. Siguiendo estos pasos habrá un incremento de la adherencia gracias a la rugosidad del mortero de revoco. La puesta en obra de estos morteros es muy importante.
Puesta en obra.
La instalación de las baldosas cerámicas en fachadas requiere la técnica de colocación en capa fina, estando totalmente desaconsejada la colocación por puntos o a pegotes. La técnica de colocación en capa gruesa (colocación al tendido con morteros tradicionales) no garantiza una buena adhesión y está totalmente desaconsejada en ambientes de exterior con riesgo de helada, tanto en solados como en aplacados.
PROCEDIMIENTOS QUE PREVIENEN LA PATOLOGÍA.
Las características principales a tener en cuenta en soportes exteriores son las siguientes:
- Estabilidad de paramento. El soporte debe mantener sus dimensiones constantes o con variaciones dentro de límites razonables, a lo largo del tiempo, para evitar generar tensiones en las capas del sistema de fachada. En el caso de encofrados de hormigón, la retracción debida al fraguado suele prolongarse durante un cierto periodo de tiempo, por lo que para evitar tensiones en el embaldosado debe esperarse en torno a 5-6 meses desde su ejecución antes de proceder a la colocación de baldosas cerámicas.
- Flexibilidad. Aunque en la mayoría de los casos los soportes pueden considerarse rígidos, en edificaciones de elevada envergadura o sometidas a la acción de fuertes vientos pueden producirse movimientos de la estructura capaces de generar tensiones en el sistema de fachada. Para prevenir sus efectos negativos en estas situaciones puede recurrirse al uso de baldosas de menor tamaño (hasta 35x35 cm.), aplacar con sistemas de anclaje mixto, aumentar el ancho de las juntas de colocación, y disponer las juntas de movimientos son necesarias.
- Resistencia mecánica. El soporte ha de ser estable y libre de grietas activas para soportar sin rotura o daños las cargas de servicio, el peso permanente del revestimiento (baldosas, materiales de agarre y rejuntado, elementos auxiliares, etc.), y las tensiones del sistema de colocación.
- Resistencia al agua. Dado que el sistema puede estar expuesto a la presencia de agua, es necesario prevenir su efecto en forma de expansión, descomposición, desmoronamiento, aparición de mohos, eflorescencias, etc. Los soportes sensibles al agua (madera y aglomerados de madera con colas sensibles al agua, yeso o prefabricados de yeso, etc.) resultan inadecuados como cerramientos exteriores.
- Estado de la superficie: Como ya se ha indicado previamente el soporte debe presentar una cohesión suficiente para resistir las cargas de servicio. En el caso de soportes disgregables debe aplicarse una imprimación endurecedora, y si la disgregación es amplia o generalizada, deberá eliminarse toda la superficie afectada hasta encontrar el soporte sano.
- Preparación del soporte. La instalación de las baldosas cerámicas en fachadas requiere la técnica de colocación en capa fina, siendo necesario disponer de una capa de regularización debidamente maestreada, con desviaciones de planeidad inferiores a 3 mm medidos con regla de 2 m. Las superficies excesivamente lisas deberán tratarse superficialmente para incrementar la rugosidad.
- Características del mortero. Es muy importante antes de la aplicación del mortero a la superficie del cerramiento, ésta debe estar seca y limpia de polvo o cualquier elemento (pintura, aceite, etc.) que pueda interferir la adherencia del mortero. Si la superficie estuviera expuesta al sol, o fuese muy absorbente, es conveniente humedecerla previamente. En la mayoría de casos un lavado con agua puede ser suficiente para disponer de un soporte en óptimas condiciones de utilización. La capa de regularización se ejecutará con mortero de revoco del tipo GP-CSIII-W1 ó W2 según norma UNE EN 998-1 (de uso corriente para la realización de revestimientos exteriores con resistencia a la compresión a los 28 días de 3.5 a 7.5 N/mm2, hidrofugado) y con valores de adhesión según UNE EN 1015-12 superiores a 0.3 N/mm2 (FP=A, B). Para garantizar el cumplimiento de estas características es preferible la utilización morteros dosificados y mezclados en una fábrica, que deberán suministrarse acompañados del correspondiente Marcado CE. Para aumentar la cohesión del mortero y evitar la formación de grietas de retracción se recomienda aditivarlo con una carga de fibras, aunque debe ser el fabricante del mortero quien decida y dosifique las fibras que considere más adecuadas.